Finaliza nuestra vendimia 2022: más breve y de excelente calidad

Tras un mes de intenso trabajo en el viñedo, nuestra vendimia 2022 llegó a su fin el pasado 15 de septiembre. Una vendimia que este año comenzó un par de semanas antes respecto a años anteriores, el 11 de agosto, como consecuencia del intenso calor vivido ya desde mayo. No obstante, gracias al magnífico trabajo de nuestros viticultores durante todo el año, la calidad de esta vendimia es excelente, aunque con algo menos de cantidad. Te contamos cómo ha sido nuestra vendimia 2022.

Y es que este año la vendimia ha estado marcada por un inicio temprano respecto a las fechas medias de la bodega. “Este adelanto se debió a las altas temperaturas y a la escasez de lluvias que hubo durante todo el verano”, nos explica el Departamento de Viticultura. Además, también se ha caracterizado por ser una de las vendimias más breves con una uva sanitariamente perfecta, pero con una merma en cantidad de uva en las parcelas de secano de las variedades tintas, aunque su calidad sigue siendo excepcional.

La vendimia 2022 comenzó en LAUS con la uva chardonnay, habitualmente la más temprana en el Somontano

La vendimia 2022 se inició el jueves 11 de agosto con la variedad de uva chardonnay, lo que supuso un inicio temprano respecto a las fechas medias de otros años, con aproximadamente una semana de adelanto. Desde el Departamento de Viticultura nos explican que “esto se debe principalmente a las duras condiciones de temperatura y humedad relativa experimentadas durante la ola de calor de junio y julio, que propiciaron una acumulación de azúcares más rápida de lo habitual”. ¿Sabías que este verano se han registrado temperaturas récord en el Somontano, superándose los 40ºC en el mes de junio en las zonas más al sur? Así, la vendimia comenzó con la variedad chardonnay del valle de Torrefierro, con una media de grado probable de 13,4 y una acidez de 4,5, valores ideales para la elaboración del blanco joven LAUS Chardonnay.

La vendimia prosiguió con la variedad merlot, una variedad muy sensible a las temperaturas altas. “En años como el actual, esta variedad sufre una aceleración de la maduración más acentuada que el resto de las variedades, lo que ha propiciado que se vendimie en fechas similares a la chardonnay”, argumentan desde Viticultura. Además, esta variedad ha sufrido mermas considerables respecto a la cantidad, es decir, los rendimientos han sido inferiores a la media.

Y no fue hasta la tercera semana de vendimia cuando se comenzó a recoger la variedad syrah. “Aun siendo una variedad más tardía, la recogimos antes del mes de septiembre, ya que en el caso de LAUS la destinamos a elaborar nuestro rosado, por lo que no es necesario un grado alcohólico tan alto”, apuntan desde Viticultura, además, añaden que, “de esta forma, se consigue que tenga una acidez más elevada, ayudando así a que el vino esté dotado de una frescura más marcada”.

La vendimia de variedades tintas comienza más tarde ya que necesitan más tiempo para una maduración completa

Tras estas primeras semanas donde se empezó a vendimiar las uvas destinadas a vinos más jóvenes, se dio comienzo a la vendimia de variedades tintas que necesitan más tiempo hasta alcanzar una maduración completa y con más grado alcohólico, para poder expresar así el alto valor de la zona del Somontano en nuestros vinos de crianza o reserva. Por ejemplo, dimos comienzo a la vendimia de la garnacha tinta, una variedad que, en un año con una climatología complicada, con unas temperaturas récord y una mínima pluviometría, ha dado una calidad excepcional. Esto es debido a que esta variedad se ha adaptado a los rigores del duro clima del Somontano, resistiendo así a la falta de precipitaciones en los viñedos de secano y manteniendo aun la producción en cuanto a cantidad, haciéndola esta campaña mucho mejor cualitativamente que otras variedades, ya que su maduración ha sido lenta y completa, alcanzando unas características complejas y óptimas para un futuro vino. Además, desde Viticultura nos explican que “el buen hacer de los viticultores del Somontano, acostumbrados a veranos difíciles, con un viñedo bien cuidado, con una adecuada cantidad de uvas, y con un meticuloso manejo de la vegetación, ha hecho que hayamos podido vendimiar lo que será una de las mejores uvas tintas de esta campaña, la garnacha tinta”.

Por último, la segunda semana de septiembre se vendimió la cabernet sauvignon, una variedad de porte más leñoso a la que le favorece que su maduración sea más lenta, consiguiendo de esta manera una calidad y concentración magnífica para elaborar de esta forma crianzas y reservas de gran calidad. Al igual que el merlot, las parcelas de cabernet han tenido rendimientos más bajos de lo habitual, sin que se vea afectada la calidad.

En resumen, la vendimia 2022 será recordada como unas de las más breves, con una uva sanitariamente perfecta, una merma en cantidad sobre todo de las parcelas de secano de las variedades tintas, pero una calidad excepcional que seguro se reflejará en los futuros vinos que están por venir, fiel representación de los Aromas del Somontano.

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